JOSÉ MARTÍ

 

 

CADA UNO A SU OFICIO

Fábula nueva del filósofo norteamericano Emerson

 

 

              

La montaña y la ardilla

 

Tuvieron su querella:

 

-"¡Váyase usted allá, presumidilla!"

 

Dijo con furia aquélla;

 

A lo que respondió la astuta ardilla:

 

-"Sí que es muy grande usted, muy grande y bella;

 

Mas de todas las cosas y estaciones

 

Hay que poner en junto las porciones,

 

Para formar, señora vocinglera,

 

Un año y una esfera.

 

Yo no sé que me ponga nadie tilde

 

Por ocupar un puesto tan humilde.

 

Si no soy yo tamaña

 

Como usted, mi señora la montaña,

 

Usted no es tan pequeña

 

Como yo, ni a gimnástica me enseña.

 

Yo negar no imagino

 

Que es para las ardillas buen camino

 

Su magnífica falda:

 

Difieren los talentos a las veces:

 

Ni yo llevo los bosques a la espalda,

 

Ni usted puede, señora, cascar nueces."