FILIS DE SEÑORA

Lo primero a hacer antes de colocar unos filis es retirar los viejos si los hubiera, con cuidado de no rasgar la suela del piso al tirar de los viejos.

Después observaremos el tipo de base sobre la que estos se van a colocar. prestando especial atención a su solidez, así como a las irregularidades evidentes que puedan existir en su grosor.

Se colocan los filis prefabricados sobre el zapato con el fin de marcar el punto limite que será cubierto con el nuevo material o bien cogeremos un patrón del piso, para cortar la pieza de la plancha de material.

 Ya con la pieza a pegar preparada, lijamos las superficies a unir. Aplicamos el pegamento y esperamos a que se seque.

  Pegamos los filis empezando siempre desde la parte más cercana al talón  pegándolo progresivamente hacia delante, con un especial cuidado de no dejar arrugas que nos obligarían a despegar la pieza. Si erráramos en la colocación, deberemos despegarlos con un tirón seco.

  Si al tirar vemos que alguna parte de las superficies a unir ha perdido el pegamento, deberemos lijar de nuevo y repetir el proceso de pegado.

  Se asienta el filis con la mano prestando especial atención a los cantos de la suela y se  martillea el piso para asentarlos, golpear con el martillo plano pues si lo hacemos de canto romperemos el filis y en el peor de los casos la suela, y en el mejor de ellos dejaremos marcas del golpe en los pisos. Si quedaran burbujas de aire entre los filis y la suela, se pinchara el material con una lezna fina o cualquier punzón y se asentará asegurándose de que no ha quedado ningún aire que evite el perfecto pegado.

  Ha llegado el momento de preparar el zapato para el remate.

  Con una cuchilla se corta el material restante dejando con los pisos una distancia de seguridad, más o menos 2 mm,  procurando no superar la línea que nos marcan las suelas sobre las que se asientas los filis.

  Si no tenemos unas lijas potentes que nos permitan rematar en ellas los filis deberemos cortar tan fino como podamos pues ese será el remate que demos al zapato.

  Llevamos los zapatos a las lijas, retirando el material sobrante, ¡¡ cuidado con la piel !!. También lijamos la parte de atrás del filis eliminando el escalón que se produce entre estos y el piso antiguo. Si los filis son de goma de cámara de neumático podremos incluso realizar un dibujo en los mismos. 

  Limpiamos el polvo y teñimos los cantos desgastados con tinta de anilina, se dejan secar, los aplicamos cera seca de color y los sacamos lustre frotando con un trapo. Limpiamos los zapatos y listo.  

    PROBLEMAS

  Los problemas que pueden surgir a la hora de colocar unos filis de Caballero, aparte de los problemas de pegado de la pieza, son los siguientes (si has tenido algún problema que no se relaciona te agradecería que me pusieras al corriente): 

Problemas de pegado

Existen en el mercado algunos compuestos para la fabricación de pisos para el calzado que exigen una preparación para que el pegamento surta efecto sobre ellos. Se puede observar que estos compuestos, al someterlos a la acción de las lijas no producen polvo, sino que se produce un fundido del mismo. Esto exige la aplicación de un compuesto quimico que servirá de base una vez seco al pegamento. Si bien los fabricantes anuncian  que estos compuestos pegan de maravilla, tengo que decir que colocar filis a estos pisos es una perdida de tiempo y dinero.  

Agujeros en el piso

Si al apretar con el dedo notáramos zonas mucho más finas que las que la rodean o si existieran directamente agujeros en las suelas sobre las que han de situarse los filis, deberemos añadir un parche, si es posible del mismo material que los pisos, que una vez pegado, rebajaremos con las lijas consiguiendo que las suelas tengan el mismo grosor y solidez en todos sus puntos. Para la colocación de estos parches siempre hay algún recorte de otro trabajo que nos puede servir.

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