La posibilidad de que el agro argentino cuente con
combustible propio, el biodiesel, comienza a tomar forma. Tras una serie de
reuniones entre el gobierno de la provincia de Buenos Aires y la Jefatura de
Gabinete de Ministros, con los impulsores del proyecto y el Consorcio Regional
Municipal de Desarrollo Regional (Cidere), los productores estarían cerca de
explotar verdaderos “pozos de petróleo”, gracias al uso del aceite de girasol
para crear combustible.
INICIATIVA
Una de las iniciativas destinadas a obtener energía a partir
de un cultivo nació tras la profunda crisis que amenazó con desplazar al
girasol definitivamente del mapa agropecuario nacional.
Un productor de Tres Arroyos, Mauro Knudsen, evaluó el
biodiesel y encargó un estudio de factibilidad para la construcción de una
fábrica que diera 40.000 toneladas de combustible, el consumo anual de gasoil
del Cidere (conformado por los partidos de Tres Arroyos, Benito Juárez,
Gonzales Chaves y San Cayetano), para lo cual se requiere una inversión de entre
US$ 8 y 10 millones.
BIODIESEL
"El biodiesel es un combustible ecológico que se logra
a partir del aceite de girasol, soja, colza o palma. Se lo obtiene gracias a la
reacción química del aceite cuando se lo mezcla con alcohol (metanol o etanol)
y catalizador (hidróxido de sodio)." Entre sus probadas características
técnicas, supera al combustible fósil porque es renovable, ecológico -reduce 20
veces las emisiones de monóxido de carbono- y se biodegrada en un 98% durante
tres semanas.
La Argentina, el mayor productor mundial de girasol, produce
más de lo que se demanda. Además, los mercados asiáticos reemplazan
gradualmente este aceite por el de palma, y el auge de la soja también jugó en
contra de los deprimidos precios del girasol.
Knudsen prevé que la cotización del producto no mejorará,
pero que el biodiesel puede revertir la situación. "El productor puede
mejorar entre un 12 y un 15% su rentabilidad destinando sólo el 5% de su
producción territorial para biodiesel", señaló Knudsen.
En el flujo industrial que tiene en mente, cada 2,5 kilos de
semillas se logra un litro de combustible.
FINANCIAMIENTO
Europa produjo más de un millón de toneladas de biodiesel
este año, la cuarta parte del consumo de gasoil en la Argentina.
"El apoyo financiero de los extranjeros está casi
garantizado. El medio ambiente es para ellos una prioridad y la única manera
que tienen para que el mundo queme más limpio es financiando este tipo de proyectos",
remarcó Esteban Knudsen, padre de Mauro. Pero el problema no pasa por la
inversión sino por la estabilidad jurídica y la seguridad fiscal, pues en la
Argentina los combustibles líquidos están gravados con el ITC.
En el caso del gasoil, este impuesto representa $ 0,12, y el
precio mayorista del combustible es de $ 0,50 (sólo el ITC es el 24% del
precio, después hay que sumarle los otros impuestos). Según el estudio de
factibilidad, el productor estaría pagando $ 0,32 el litro de biodiesel, sin la
carga del ITC.
La sola posibilidad de que se aplique este impuesto al
combustible Bio (que hoy no está considerado gravable en la ley 23.966)
representa una traba, ahuyenta inversiones. De ahí el reclamo de los miembros
del Cidere a las autoridades para que exista un compromiso expreso por respetar
la letra de la ley: "Si el precio del petróleo baja y el del girasol sube
es un riesgo que el capitalista está dispuesto a correr, pero no que se grave
con ITC el biodiesel", señaló el productor Nicolás Ambrosius.
"Si se da la estabilidad fiscal, tenemos asegurado un
importante flujo de inversiones", sostuvo el intendente de Tres Arroyos,
Carlos Aprile, ante funcionarios de la Subsecretaría de Recaudación y Ejecución
Tributaria.
DECISIONES---POLÍTICAS
Lejos de pedir ayuda financiera, los impulsores del proyecto
reclaman voluntades políticas que se comprometan a mantener el actual statu quo
del biodiesel. Para ello recurrieron al gobernador de Buenos Aires, Carlos
Ruckauf, quien se mostró muy interesado y llamó personalmente al jefe de
Gabinete, Chrystian Colombo, para que tomara conocimiento.
El jefe de asesores de Colombo, Manuel Cywin, se interesó
por la iniciativa y coincidió en la necesidad de la seguridad fiscal que le dé
vía libre.
En el país existen antecedentes de garantías fiscales en
actividades como la minería, la forestación, la energía eólica y solar. Y según
sus impulsores, el biodiesel es un candidato a compartir esta protección.
Según el subsecretario de Recaudación y Ejecución
Presupuestaria, Rubén Torres, "si este proyecto se generaliza a todo el
país la base impositiva que se forma con el ITC quedaría hueca y las provincias
carecerían de esta fuente de financiamiento", por el evidente reemplazo
del gasoil.
Frente a este argumento, quienes promueven el biodiesel
contestaron que en la venta de girasol se retiene el 12% del IVA: "Si en
virtud de este proyecto se recupera el precio de la oleaginosa, aumenta a su
vez lo recaudado por el IVA, y salda así lo que se resigna en concepto del
ITC", señaló Mauro Knudsen.
Sin embargo, en materia fiscal, el Poder Legislativo es el
que arbitra.
El próximo martes los recibirá el secretario de Agricultura.
Esperan sumar más compromisos políticos para garantizar la seguridad jurídica
en un régimen de promoción industrial cuyo fin específico es abastecer de
energía a un módulo productivo de casi 2 millones de hectáreas. Los productores
decidieron canjear "protestas por propuestas... ahora esperamos decisiones
políticas".
Fuente: Emiliano Galli