La no recuperación de la faena y la exportación de carne ovina se debe fundamentalmente a las restricciones de mercados que debe enfrentar el país por su nueva condición sanitaria y por la retención que comienza a observarse por la mejora de los precios de la lana.

En la actual condición sanitaria en la que se vacuna contra la fiebre aftosa, sólo se puede acceder a los mercados con carne desosada y madurada, lo que constituye una importante restricción. Por otra parte, recién ahora se está formalizando la faena del Operativo Cordero Pesado, a la vez que estiman que rápidamente se retome la corriente tradicional de exportación de cortes desosados de traseros ovinos. Por su parte, el técnico del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), Carlos Salgado, coincidió en destacar que la recuperación de los mercados internacionales de la lana, que en la plaza interna permitió recuperar un 55% el valor de la fibra, está actuando como freno en el proceso de liquidación que registraba este subsector ganadero.

Es evidente que esta situación favorable de la lana está generando una retención y entre otras derivaciones provocará que en forma creciente la faena de ovinos se vaya concentrando en la categoría de corderos pesados. Salgado agregó que mientras el precio interno de la lana se recuperó en un 55%, existe una menor oferta de corderos de reposición y su precio aumentó en un 25%.

Según datos suministrados por el Instituto Nacional de Carnes (INAC) la faena de ovinos de los 3 primeros meses del 2002 asciende a 232.178 cabezas, en tanto que en igual lapso del año pasado esa cifra se ubicó en 437.751, lo que marca una caída del 47%.

Por su parte las exportaciones de carne ovina mantienen a la Unión Europea (UE) y el Mercosur como principales destinos. Sin embargo la UE importó en este período 1.861 toneladas contra 3.207 del período anterior, en tanto que el Mercosur compró 457 toneladas contra 2.313 del año pasado. En total Uruguay exportó hasta el 6 de abril un total de 2.837 toneladas contra 6.616 toneladas en igual período de 2001, registrando una caída del 57%. El precio promedio se ubicó en US$ 1.725 la tonelada peso carcasa.

Fuente: El Observador e Instituto Nacional de Carnes (INAC)