El título «Moral económica en `Suma de tratos y contratos' de fray Tomás de Mercado» corresponde al proyecto de tesis doctoral que en el área de Filosofía estoy realizando. Debido al poco tiempo que llevo trabajando el tema, en ésta ocasión presentaré a grandes líneas la situación en la que se encuentra el estudio de la vida y obra de éste insigne dominico hispano-mexicano y los objetivos que pretendo alcanzar en este proyecto. El trabajo lo realizaré apoyándome en la bibliografía consultada y seguiré, en la exposición, un orden cronológico.

I. Estado general de la vida y la obra de Tomás de Mercado.

1. Estado actual de la biografía de Mercado

En 1950 Oswaldo Robles expresaba, refiriéndose a Tomás de Mercado, que «pocos datos son los que tenemos de la vida de este fraile ilustre»{1}. En efecto, los únicos datos que se tenían, no sólo hasta la fecha señalada por Robles, sino hasta 1970, año en que aparece la obra de Daniel Ulloa, eran los de Dávila Padilla. Dávila Padilla menciona en tres ocasiones a fray Tomás de Mercado. La primera es cuando habla del padre fray Alonso López, muerto en 1558{2}. La segunda referencia es la más importante y es la que más citan los autores posteriores para darnos noticias de la vida y la obra de Mercado{3} y, la última alusión es cuando hace referencia a los religiosos de la provincia de Nueva España que escribieron libros{4}. Los datos que nos proporciona Dávila se pueden resumir de la siguiente manera: Mercado fue Lector en el convento en 1558; era un hombre de mucho ingenio; fue discípulo, en el convento, de Pedro de Pravia; afirma que escribió en Sevilla el libro de Tratos y contratos, aunque no menciona la edición de Salamanca; las principales resoluciones fueron sacadas en las disputas y argumentos de Santo Domingo de México; Mercado estudió en el convento, no en la Universidad; también compuso la Lógica y Argumentos; no menciona la fecha de su retorno a México, sólo señala que cuando volvía a honrarlo, una enfermedad se lo llevó a las vistas del puerto de San Juan de Ulúa en 1575.

La obra de Ulloa vino a completar, en parte, algunas incógnitas e imprecisiones de la vida de Mercado como: sus años de estudio y formación religiosa, el desarrollo de la vida religiosa al interior del convento, el claustro de profesores que integraban el Estudio, los requisitos que tenían que cubrir los frailes para ir accediendo a las distintas etapas de la vida religiosa y su vida docente como Lector en Artes, desde 1558 hasta el curso 1562-1563, fecha en la que se embarcó para España.

En 1987 aparece un artículo dedicado exclusivamente a la biografía de Mercado. En este escrito, Lázaro Sastre{5} recoge los datos de Dávila Padilla, de Ulloa y, en base a la consulta de archivos y otros documentos, reconstruye, en buena medida, la biografía de Mercado. Sin embargo, aún quedan interrogantes por resolver e hipótesis por confirmar, tales como: fecha de nacimiento; orígenes familiares; el paso al Nuevo Mundo; su edad y fecha de ingreso a la orden dominicana; reconstruir el currículum de estudios, tanto en Nueva España como en España; aclarar la fecha y lugar en que se graduó de Maestro en Teología; su actividad pastoral y docente en el convento dominicano de la Nueva España y en la universidad de santo Tomás de Sevilla, y corregir las imprecisiones que se han cometido a lo largo de la historia. Algunos de estos errores son: su fecha de nacimiento{6}; su origen sevillano; &c.{7}.

2. La obra y sus ediciones

La primera edición de la obra fue en Salamanca en el año de 1569{8}. Posteriormente, la Suma se reimprimió corregida y aumentada en Sevilla en los años de 1571{9}. 1573{10} y 1587{11}. Todos los estudiosos de Mercado mencionan las reimpresiones de 1571 y 1587, pero no la de 1573 que totalmente desconocida hasta el momento. La edición de 1569 fue traducida al italiano por Pietro Maria Marcheti en Brecia en 1591. Recientemente se ha vuelto a reeditar la Suma en dos ocasiones. La primera fue editada y preparada por Restituto Sierra Bravo en Madrid en 1975{12} y la segunda por Nicolás Sánchez Albornoz en Madrid en 1977{13}. Es de notar que estos dos autores se preocupan, sobre todo, por los temas económicos.

3. Situación de la vida y la obra a lo largo de los siglos

La influencia de la obra de Mercado se hizo notar rápidamente en el ámbito de la Teología Moral en los teólogos del último período del siglo XVI y primera mitad del XVII. Su presencia se encuentra en los grandes tratados de Teología Moral, en las obras del Arte de los contratos y en los Manuales de confesores{14}. En términos generales, el libro es citado en relación con los cambios, el comercio, la tasa del trigo y la esclavitud.

La importancia de la obra de Mercado llega hasta la primera mitad del siglo XVII. Lugo (1642) es el último teólogo que la cita y a partir de esta fecha el escrito queda prácticamente olvidado. Pero, tal vez el olvido no sea del todo cierto si tenemos en cuenta que es a través de Lessio (1554-1623) como el pensamiento escolástico español se transmitió a Hugo Grocio y éste, a su vez, difundió dichas ideas a Pufendorf y Turgot y a la Escuela Escocesa compuesta por Hutchenson (1694-1746), Adam Smith (c.1723-1790) y Ferguson (1725-1816). Si esta afirmación es correcta, faltaría investigar el peso específico que ejerció Mercado en los denominados fundadores de la ciencia económica.

A finales del siglo XIX, la obra de Mercado pasa de ser preocupación de teólogos y filósofos, a ser preocupación de los economistas, principalmente. Colmeiro lo cataloga dentro de los economistas españoles{15}. Pero, es a partir del siglo XX cuando la obra es, propiamente, estudiada desde el punto de vista de la economía ya que ven en ella aportaciones interesantes al análisis económico.

En 1928, André Sayous hablando de las numerosas e interesantes obras españolas sobre los cambios, destaca en primer lugar la Suma de Mercado. Dice al respecto: «en el primer rango es preciso poner el Tratado, de Tomás de Mercado, la más importante de las publicaciones sobre España y América, durante la segunda mitad del siglo XVI.»{16}

A partir de las referencias que Sayous hace a la Suma, un numeroso grupo de economistas se ocupará de ella. La lista está integrada por franceses, austriacos, ingleses, españoles, norteamericanos, alemanes y, muy recientemente, por argentinos y mexicanos. En términos generales, las menciones a la obra están en relación con los temas de industria, comercio, monopolios, remesas, precios, banca, ferias, intercambios, mohatas, censos, metales preciosos y su duración, &c. En el centro de todas estas referencias se encuentran la teoría cuantitativa del dinero y la formulación de la teoría del tipo de cambio basada en la paridad del poder adquisitivo.

En menor escala, la obra va a ser considerada por teólogos y filósofos. Caben destacar, en el campo de la teología moral, el artículo de Pedro Mª Abellán{17} y en filosofía el de Mauricio Beuchot{18}. Así mismo, no dejará de ser registrada por historiadores de diversas disciplinas, bibliógrafos y catalogadores a lo largo de la historia. Sin embargo, todos estos estudios sobre la vida y la obra de Mercado distan mucho de presentarnos una visión completa y profunda de su pensamiento y dejan, como diría Pedro Mª Abellán «campo abierto para futuras investigaciones»{19}. Creo que la constatación de este hecho, obtenido de la revisión bibliográfica, es suficiente para que amerite un trabajo de tesis doctoral que hasta el momento no se ha realizado.

II. Líneas generales de nuestro Proyecto

Por lo anteriormente expuesto quedan muchas tareas por realizar en torno a la vida y la obra moral de Tomás de Mercado. Entre las tareas que quedan aun pendientes podemos enunciar las siguientes: completar su biografía para no incurrir en más imprecisiones; presentar un estudio detallado de las distintas ediciones señalando sus semejanzas y diferencias; investigar la influencia que ejerció Mercado en los denominados fundadores de la Economía Política; analizar los calificativos que sobre el dicho autor se han emitido tanto en el ámbito de la Filosofía como de la Economía. En Filosofía lo han catalogado como un tomista ortodoxo y seguidor, en parte, del nominalismo; en Economía lo han clasificado como mercantilista.

Así mismo, profundizar en las relaciones mercantiles entre el Nuevo y el Viejo Mundo; la trata de esclavos; &c. Pero, sobre todo dar a conocer de manera amplia y clara la vida y la obra moral de éste ingenioso Sevillano, como atinadamente lo llamara fray Luis de León en la censura que hizo de la Suma. De estos planteamientos podemos extraer los objetivos de nuestra investigación.

1. Objetivo general: Dar a conocer la vida y la obra moral de fr. Tomás de mercado haciendo énfasis en la relación tan estrecha entre Filosofía Moral y Economía y el significado que tuvo para los hombres del siglo XVI.

2. Objetivos específicos:

— Contribuir a un mayor conocimiento de nuestro siglo XVI Hispano y Novohispano desde el punto de vista de la Filosofía Moral y Económica.

— Dar a conocer la vida y la personalidad de este autor en los aspectos que aún no han sido investigados.

— Ofrecer un estudio crítico de uno de los filósofos hispano-mexicano más importante del siglo XVI que supo ofrecer, en su momento, una guía para el comportamiento moral y económico.

— Analizar la influencia que su obra ha causado en los fundadores de la Economía Política.

— Analizar la obra desde el punto de vista de la Filosofía Moral y establecer sus nexos con sus predecesores.

Finalmente, el marco teórico de referencia será el tomismo profesado en la Escuela de Salamanca en el que los aspectos económicos formaban, sin problema alguno, parte de la moral. La actividad económica era un laboratorio de problemas a los que debían dar respuesta los teólogos moralistas del siglo XVI. De esta manera, la economía cuestiona a la moral y, viceversa, la moral interpela a la economía y exige que vele sobre las conciencias de sus agentes económicos. Este modelo ya no se da en la actualidad. Los economistas rechazan la normatividad de la moral y los filósofos se distancian cada vez más de éste gran laboratorio de problemas morales que suscita dicha disciplina.

{1} Oswaldo Robles, «Fray Tomás de Mercado, traductor de Aristóteles y comentador de Pedro Hispano en la Nueva España del siglo XVI», Revista de Filosofía (México), año IX (1950), págs. 544-545.

{2} Agustín Dávila Padilla, Historia de la fundación y discurso de la Provincia de Santiago de México de la Orden de Predicadores, Editorial Academia Literaria (reproducción en facsímil de la de 1625), México 1955, pág. 237.

{3} Ibid., pág. 587.

{4} Ibid., pág. 653.

{5} Lázaro Sastre, «Nuevas aportaciones a la biografía de Tomás de Mercado», en Los dominicos y el Nuevo Mundo, Sevilla 1987 (Actas del I Congreso Internacional).

{6} Algunos autores afirman que Mercado nació en 1500, como Alejandro A. Chafuen, Economía y ética. Raíces cristianas de la economía del libre mercado, Rialp, Madrid 1992, pág. 31; otros que fue en el año de 1523 como Antonio Ibarguengoitia, Filosofía mexicana en sus hombres y en sus textos, Porrúa, México 1989, pág. 25; finalmente, otros se inclinan por el año de 1530, como Nicolás Sánchez Albornoz en el estudio preliminar a la obra de Tomás de Mercado, Suma de tratos y contratos, vol. I, Madrid 1977, pág. X, &c.

{7} Nicolás Antonio, Biblioteca hispano nova, tomo II, Madrid 1788, págs. 469-470 y Wilhelm Weber, Geld und zins in der spanischen spätcholastik, Müster 1962, pág. 16, señalan que Mercado nació en Nueva España.

{8} Un ejemplar de esta edición se encuentra en la Biblioteca General de la Universidad de Salamanca, con la signatura topográfica: 1/17168.

{9} Ejemplar en la Biblioteca General de la Universidad de Salamanca, signatura: l/2240.

{10} Un ejemplar se encuentra en la Biblioteca de la Universidad Pontificia de Salamanca con el número de signatura: 3-115-B/14.100.

{11} Número de colocación: 1/17074-BGUS.

{12} Tomás de Mercado, Suma de tratos y contratos, edición preparada por Restituto Sierra Bravo, Editora Nacional, Madrid 1975 (Clásicos para una Biblioteca Contemporánea).

{13} Tomás de Mercado, Suma de tratos y contratos, 2 vols., Edición a cargo de Nicolás Sánchez Albornoz, Instituto de Estudios Fiscales, Ministerio de Hacienda, Madrid 1977.

{14} Los tratados de Teología moral son: Luis de Molina (1593), De iustia et iure, Maguncia 1614; Domingo Bañez (1594), De iure et iustitia decisiones, Salamanca 1594; Pedro de Aragón (1596), De iustitia et iure, Lyon 1596; Fernao Rabelo (1608) y Juan de Lugo (1642), De iustitia et iure, en Opera Omnia, 7 vols., Venecia 1751 (en especial el vol., 2: «De contractibus in communi et in particulari»). Los manuales son: Bartolomé de Albornoz (1573), Arte de los contratos, Valencia 1573; Luis López (1594), Tractatus de contractibus et negotiationibus, Lyon 1594; Manuel Rodríguez Lusitano (1594), Suma de casos de conciencia con advertencias muy provechosas para confesores, Salamanca 1594. Pedro de Ledesma (1603), Antonio Diana (1629, 1636-1656), Andrés de la Madre de Dios.

{15} Manuel Colmeiro, Historia de la economía política española, tomos I-II, Imprenta de Cipriano López, Madrid 1983; Biblioteca de los economistas españoles de los siglos XVI, XVII y XVIII, prólogo de Javier Márquez, UNAM, México 1983.

{16} Citado por Restituto Sierra en Tomás de Mercado, Suma de Tratos y contratos, Editora Nacional, Madrid 1975, pág. 9.

{17} Pedro Mª Abellán, «Una moral para comerciantes en el siglo XVI. Significación de la Suma de Fr. Tomás de Mercado en la historia de la Teología Moral», Miscelánea Comillas, 15-16 (1951), págs. 81-137.

{18} Mauricio Beuchot, «La justicia en Tomás de Mercado», ponencia presentada en el IX Seminario de Historia de la Filosofía Española e Iberoamericana (Salamanca 1994), en prensa.

{19} Pedro Mª Abellán, op. cit., pág. 84.